5 tips nutricionales para Navidad

Puede que no sea necesario bajar ningún kilo después de navidades si conseguimos no ganarlo.

Podemos seguir las siguientes pautas o trucos:

-En navidades tenemos más reuniones familiares, con amigos e incluso con compañeros de trabajo y todas ellas tienen como objetivo hacer la típica comida o cenita navideña. Es cierto que estas comidas no son las más saludables del mundo (ni mucho menos), pero controlando y no sobre pasando la cantidad no tenemos por qué verlo reflejado en nuestro cuerpo.

1. Todos hemos podido comprobar que desde el mes de octubre empiezan a inundar en los supermercados una amplia oferta de turrones, polvorones, bombones y demás dulces navideños. Pues bien, el truco para no comerlos es sencillamente no comprarlos. Al menos no de momento. Tenemos que pensar bien cuantos dulces necesitaremos, no excedernos en la cantidad y sobre todo no tenerlos puestos a la nuestra vista desde que los compramos hasta que se acaban, únicamente tomarlos en pequeña cantidad los días clave (cena de Nochebuena, comida de Navidad, Nochevieja y Año Nuevo).

2. Debemos controlar la cantidad. Cuando en una comida hay muchos platos para picar normalmente cogemos para probar un poco de cada, mientras hablamos con nuestros amigos o familiares y nos olvidamos de cuantas porciones hemos comido de cada alimento. Un truco para antes de empezar a comer es ver bien lo que hay en la mesa, seleccionar lo que nos queremos comer y ponernos un poquito de cada en nuestro plato, evitando el picoteo una y otra vez y siendo así conscientes de lo que comemos.

3. Comer despacio, aprovechando para charlar con nuestra gente y degustar la comida rica y especial que hemos preparado. Esto hace que los alimentos se asimilen mejor y nos sintamos antes saciados. Es muy importante escuchar a nuestro cuerpo, si nos sentimos saciados es mejor parar de comer, pues si seguimos comiendo llegaran esas molestias desagradables que van desde la hinchazón a incluso las nauseas.

4. Cuidado con las bebidas, especialmente las azucaradas y las alcohólicas. Cuando nos tomamos unas patatas fritas o un trozo de tarta solemos ser más conscientes de que esos alimentos son poco saludables y debemos moderar su consumo. No pasa de la misma forma con las bebidas, nos tomamos un refresco azucarado, unas copas de vino y algún que otro “copazo” y nuestra percepción no es la misma. Mi consejo es mucho cuidado con la bebida, pues tanto los azúcares como el alcohol encabezan la lista de alimentos a la hora de ganar peso. Algún refresco sin azúcares, cerveza sin alcohol o una copa de vino tinto son las opciones más saludables dentro de este tipo de bebidas.

5. Si nosotros hacemos algún plato en estas comidas/cenas podemos controlar sus ingredientes, evitando además los platos precocinados y pudiendo elegir alimentos bajos en grasas saturadas y azúcares refinados. Así como evitar salsas y optar por especias o aliños más saludables (vinagretas ligeras, zumo de limón o naranja, aceite de oliva virgen extra, salsa de yogur sin azúcares añadidos, salsas de tomate casera, e incluso una mahonesa ligera).
Podemos hacer canapés de salmón y aguacate, verduras a la plancha con queso ligero, el típico jamón curado con tomate, guisos de pescado y mariscos o postres saludables como por ejemplo un mus de limón, cuya base fundamental son las claras de huevo, el yogur natural y el limón (una de las frutas más ricas en vitamina C). Estas opciones son fáciles y ayudan a cuidarnos, pero hay infinidad de combinaciones ricas, sabrosas y saludables que se nos pueden ocurrir.

Y por último y muy importante debemos tener en cuenta el ejercicio físico, ya que es nuestro aliado fundamental para compensar estos extras navideños. Además, en estas fechas solemos tener algún que otro día libre ¿qué mejor forma de descargar estrés, divertirnos y ganar en salud que haciendo un poco más de ejercicio?

María Sanchez Maroto,  Dietista – Nutricionista de Zagros Sports